Víctor Varela. Las Vegas. |
Parte uno
Esto no es una crítica, es un
comentario desenfadado, una reflexión obligada. Podría ser una crítica, pero no
quiero que lo sea, aspiro a más. La hago desde el artista que soy, con toda la
intensión de considerarla como parte de mi obra. Así que no es una tarea. Además
de pintar, también escribo, será un placer tomar por asalto la voz de una
función a menudo olvidada: vincular arte y gente, obra y sociedad con el objeto
de permitir un diálogo fecundo. Dejar de callar en nombre mío para hablar en
nombre de todos los colegas que me han acompañado en la misma carrera, la
misma ilusión.
No por casualidad días despues que
Donald Trump gana las primarias republicanas en Nevada, Latin American Art
Gallery estrena la primera exhibición de arte latino en Las Vegas. Esta
evidencia de la polaridad no es coincidencia ante el avance inesperado de la
xenofobia en los Estados Unidos de la segunda década del S XXI, así que en
contraposición a la evidencia primera una fuerza contraria, orgánica y
consecuente con la historia persiste en resaltar lo opuesto con doble fondo:
por un lado señalar lo latino, el mestizaje espeso de la América continental
como presencia ineludible en la cultura anglosajona de Norteamérica y por el
otro apostar al arte en la capital del entretenimiento. A alguien le parece
poco?
“Una Mirada al Arte Latinoamericano” nombre
que Latin American Art ha dado a la exhibición que presenta junto con la
Galería De Chaves ha sido estrenada el pasado 26 de febrero de 2016 con el
objeto de darle a Las Vegas bastante de lo que carece: una mirada desconocida y
cercana a la América a la que está unida por la geografía, la América Central,
la insular y la Suramericana. Una mirada que se desmarca de las grandes
instituciones de belleza de occidente: lejos de las pirámides de Egipto, la Esfinge,
la torre Eiffel, la Fontana di Trevi, las góndolas de Venecia y no está viciada,
contaminada por el punto de vista esquemático, tradicional. Mirada que no
pretende ser exclusiva, sino que reclama un lugar de tolerancia en la ciudad
global para rendirle tributo a una diversidad mas amplia, menos pacata,
estereotipada.
Aunque personalmente creo que el arte
es uno solo y que los apellidos que lo inclinan a lo sectorial a veces son contraproducentes
(arte occidental, arte latino, arte cubano, etc) entiendo que Latin American
Art más que enfatizar un sectarismo busca marcar la diferencia, llamar la atención hacia
algo que en Las Vegas se desconoce plenamente. Monopolizada por el
entretenimiento banal, ese que no reconoce la existencia de un eros cognoscente
o para decirlo mas sencillo el goce por lo difícil, la América profunda puede
corer el riesgo de quedarse en el intento si no vende.
Sin embargo no existe en Las Vegas una
ley que impida tal intento así que el prejuicio ha sido parejo. Las Vegas no se
ha sentido como parte de la América Latina y Latinoamérica no se ha sentido
parte de Las Vegas. Esta cortina de tiempo que es un muro de percepción, de
cultura y de costumbre, ha vetado la posibilidad de intentar la coexistencia de
dos espacios repelentes en tiempos pasados: el arte y el entretenimiento, la
América natural y la opulenta, el Sur grave, exuberante y el norte fetiche, artificial.
Jaime Patterson, mexicano de
nacimiento y director de Latin American Gallery y Ernesto Chavés, venezolano y
curador de la exhibición han parecido advertir esto y se han decidido a dar el
primer paso.
La tarea no es fácil ya que Las
Vegas, es una ciudad de negocio, donde todo lo mueve el dinero y sobrevive solo
lo que vende. La gran pregunta que Jaime Patterson y Ernesto Chaves tendrán que
responder en acción (tienen un contrato con 12 artistas por 5 años) es si hay
lugar en las Vegas para un mercado del arte, del entretenimiento difícil, un
eros de la complejidad. Si somos consecuentes con la posmodernidad que es una
condición de las superpotencias la respuesta es si. Estamos hablando de un pop
después del pop, de una metafísica? Nada de eso. Quién dijo que el arte debe
encontrarse alojado y exclusivo en esos edificios de inutilidad pública llamados
museos que representan la seriedad de un falso vacío, desolado y deprimente,
programado por un curador que arroja sus preferencias particulares para
establecer los epígonos de la historia? Quién que el arte y el mercado han de
ser incompatibles?
New
York City
Marzo
1
No comments:
Post a Comment